Gallery Salon - Manatí

Hace 2 años atrás este salón me MUTILÓ mi cabello. Si, leíste bien. MUTILO! Me explico: Pedí y page por un tratamiento de Keratina, ya que mi cabello toda la vida ha sido muy rizado y quería algo que me quitara el frizz cuando me lo fuera a planchar. El gran problema ocurre cuando me entero gracias al ardor, olor, quemazón y resultado del tratamiento que lo que me habían vendido como Keratina era nada más y nada menos que un alisado de quinta. El primer “síntoma” de este alisado de basura fue el asqueroso olor a químico mata ratas que me quemaba las ventanas de mi nariz al ser esparcido por mi pronta a ser destrozada cabellera. El segundo “síntoma” fue la caída de piel en la parte superior del borde de mi frente. Esto obviamente fue por la óptima calidad de tal producto. Pero como en todos los casos que te dañan el cabello maquiavélicamente, no quería aceptarlo. Hasta que pasaron algunos meses y ahí pude ver los verdaderos resultados. Mi cabello comenzó a CAERSE POR MAZOS. No había necesidad de tocarlo porque con el mismo viento o simplemente por algo llamado gravedad, mis mechones de cabello renunciaban a quedarse pegados a mi cráneo. Las personas que me conocían antes de darme el tratamiento se quedaban estupefactas por el contraste que era para ese momento mi cabello. De hecho, varias amigas cercanas de la familia que eran profesionales en el mundo de la estética aseguraban que lo que me habían vendido como “el mejor tratamiento en la industria de Keratina” era un alisado de pacotilla. Y la verdad es que si hubiera un renglón que fuera "0 estrellas" aseguro que no estaría esa individual ahí.